"Era la fuente de la verdadera energía, la esencia interior del hombre, de su alma. Y que una vez que el ser humano perdía el contacto con su alma, estaba condenado para siempre."
SOBRE LA OBRA
Max es un ciudadano estadounidense cuyo nombre como dios del metal es Strigoi. Responsable de tres discos de black metal colosales vive frustado ya que a pesar de sus esfuerzos por mejorar e intentar trascender superando su legado inicial, el público no se lo reconoce. Iniciará un viaje a Ucrania acompañado de Roland un joven músico que le ayudará a crear su mejor obra en una comuna metalera en la que se vive bajo unas estrictas leyes con el objeto de volver a las raíces paganas europeas.
El black metal es un movimiento musical que surgió espontáneamente en varios lugares del mundo. Los menos profanos en la materia sitúan su génesis en Noruega y la movida de la quema de iglesias, sin embargo, si rebuscamos en sus raíces fue el movimiento underground más rico de la historia musical. En los lugares más recónditos del planeta encontrábamos bandas que, bajo la premisa de la defensa del auténtico metal, produjeron un sonido que ha dado en el tiempo obras tan diversas como las de Burzum, Darkthrone, Emperor, Cradle of Filth, Wolves of Throne Room, 1394, Watain, Deafheaven, Zeal & Ardor o Celeste. La riqueza y dimensión que ha adquirido este género es impresionante. Clara muestra de ello es lo antagónico de las bandas que he relacionado anteriormente, no como muestra de lo mejor del estilo, si no de su extrema diversidad.
El libro de David Peak me ha parecido colosal en todos los aspectos y creo que ha creado una obra multidimensional de la que sale victorioso en varios aspectos: en el literario, en el máximo respeto hacia el tema que trata, en el tratamiento filosófico... Antes de adentrarme quiero aclarar que el análisis del libro está sesgado, como siempre, desde mi perspectiva y mis vivencias, desde un apasionado de la literatura de terror, del metal extremo y de las tendencias filosóficas modernas.
Como novela de terror me parece un acierto. Va construyendo un in crescendo típico de la mejor herencia gótica pero despojándola de lo artificioso de esta. Llena de múltiples homenajes al cine clásico de terror, muy velados y muy bien encajados, es una delicia desde esta perspectiva. Una historia que te va atrapando en un viaje tanto físico como mental de sus personajes donde les llevará a un nuevo conocimiento de ellos mismos. Las atmósferas opresivas y el carácter malsano de cada escena es sobresaliente. En todo momento flotan en el ambiente las negras alas de la muerte y que todo lo que pueda salir mal, efectivamente, va a salir mal.
En el plano filosófico me parece excelente y prácticamente el libro tiene valor en sí mismo por esta vertiente. Indagando no sólo sobre la personalidad del black metal como movimiento musical sino en su más profunda esencia filosófica y su profunda relación con el paganismo, el nihilismo, la vuelta a las raíces y su vinculación seminal con el realismo especulativo.
En la parte más musical, David Peak aborda, como pide la temática, la vertiente más cruda y purista, el raw black metal, despojándolo del enfoque amarillista con el que habitualmente se aborda el tema, a la contra que en Lord of Chaos, y haciendo un análisis sincero y despojado de prejuicios.
Si quieres leer una historia de terror muy honesta con ecos de terror cósmico, folk horror, paganismo, black metal y mucha filosofía de tintes nihilista, esto es un novelón. Todo un acierto de Dilatando Mentes en una edición que engrandece la obra y con una traducción que respeta completamente la atmósfera opresiva del texto original.
¿Qué os parece?¿Lo habéis leído?
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