"Algunos de ellos vinieron de las profundidades del océano, otros vinieron volando desde el cielo. Nadie sabe de donde son."
Duración: 90 min.
Título original: ミートボールマシン
Reparto: Issey Takahashi, Aoba Kawai, Kenichi Kawasaki...
La premisa de Meatball Machine la hemos visto muchas veces en comics, películas... una invasión alienígena, que toma el control de cuerpos humanos de forma parasitaria, amenaza nuestro futuro.
Si estuviésemos hablando sobre una película de Hollywood a partir de aquí habrían grandes armas, héroes y hasta el presidente implicado en la trama. En lugar de tomar esa dirección el tono se convierte en una historia más intimista y menos grandilocuente. En lugar de narrarnos la historia con las gafas de "el capitán América" la veremos a través de los ojos de Yuji un joven que está obsesionado por su bella vecina hasta que un día consigue atraerla a su apartamento y se verán implicados en medio de la alucinada historia que nos proponen.
Precisamente esta eliminación de la grandilocuencia es uno de los puntos fuertes y que más me gustan de esta cinta, pero...
No os voy a engañar y vamos a poner las cartas boca arriba desde el primer momento. La película es sonrojante por momentos, por sus actuaciones, por lo extremo de su propuesta y por lo corto y poco trabajado que está su guión. No van por ahí los tiros el hecho de recomendar esta película. La propuesta de los directores está clara: ofrecer un show gore y ciberpunk extremo. Ahí es donde la producción me parece sobresaliente: en el aspecto visual. Los monstruos, las criaturas y los efectos especiales están realmente logrados y si disfrutas de estas cosas estamos ante una golosina muy interesante.
A diferencia del gore extremo alemán, en el Arte japonés lo principal son los estados mentales y hasta en una película como esta donde cineastas de otra nacionalidad hubiesen reflejado podredumbre, ellos sacan a relucir temas fundamentales. Para mi el gore extremo es un género que siempre está rodeado de nihilismo y aquí también lo está pero muchas veces no hay trasfondo para este mensaje. En esta ocasión sí que lo encontramos y sin duda alguna está justificado en los estados mentales que transmite convirtiéndose casi en un canto de sirena hacia la deriva de la individualidad postmoderna.
En definitiva, un delirio ciberpunk gore que mejora en el segundo acto y que disfrutaréis si habéis gozado con títulos como Tetsuo o Tokyo Gore Police.
La película cuenta con una secuela, que aún no he disfrutado, y que se vislumbra en el final de esta. Aún así la historia puede verse de forma independiente ya que la historia queda completamente cerrada.
Si la habéis visto, contadme vuestras pesadillas, si no lo habéis hecho ¿os atrevéis a adentraros en ella?
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